CRÓNICA: 21º NIPPON CONNECTION [2ª PARTE]

En la primera entrega, comenzamos a contaros nuestra experiencia en el 21º Nippon Connection. 

Este año tuvimos el placer de volver a cubrir el Nippon Connection, uno de los certámenes especializados en la cinematografía japonesa más importantes de occidente.

Sin embargo, y dada la atípica situación que estamos viviendo en todo el mundo con el COVID-19, la entidad organizadora del evento alemán ha tenido que reinventarse y entrar en la era digital con un evento telemático, celebrado desde 9 al 14 de junio a través de la plataformas Festival Scope y Shift72.

 

Una vez hecha esta breve introducción, es hora de poner punto y final a este relato con la última entrega de nuestra aventura. Así que, sin más preámbulo, toma asiento y sumérgete con nosotros en esta crónica.

SASAKI IN MY MIND

"Sasaki in My Mind" es la primera película de Takuya Uchiyama, protagonizada por Kisetsu Fujiwara, Gaku Hosokawa y Minori Hagiwara. Su estrenó en Japón tuvo lugar el 27 de noviembre de 2020 y fue premiado en los premios Kaneto Shindo y en Yokohama Film Festival y se ha presentado en Japan Cuts.

  La historia sigue las andanzas de un futuro actor, su deslumbrante compañero de clase  y sus amigos. Desplegando su pasado y presente, la trama mira de frente al brillo adolescente y al patetismo de los días pasados.  

Takuya Uchiyama, avalado por el descomunal éxito del videoclip  "The Hole" para King Gnu, y el apasionante mediometraje "Blue Forest", deja impresa su huella fílmica con esta grandiosa carta de presentación. La impronta emocional que emerge tras la catártica tragedia por la pérdida de un amigo converge en su nexo referencial con su coetánea "Remain in  Twlight" (Daigo Matsui, 2021). 

La  fuerza vitalista se diluye en pos de una elegía marcada por el lamento, la introspección y la soledad. La última despedida no sólo al ser querido, sino a esos lazos ligados a un pasado idealizado, cuyo recuerdo es lo único que permanecerá.

Kisetsu Fujiwara, tras sorprender en "His", ha pulido todos los errores que adolecían en su interpretación hacia una naturalidad subyugante, demostrando su grandeza como actor. Aunque el verdadero descubrimiento ha sido la arrebatadora actuación de Gaku Hosokawa en el papel de Sasaki, capaz de construir un perfecto equilibrio entre su fragilidad intrínseca hacia su esencia cómica.

La prodigiosa fotografía de Hidetoshi Shinomiya es el lienzo en el que se cohesionan todas sus partes a través de su paleta de tonos fríos y sombríos en comunión con su aura crepuscular a modo de esbozo pictórico. Una reminiscencia a su obra posterior en "Drive My Car" (Ryusuke  Hamaguchi, 2021), de la que se espera un justo reconocimiento de su infravalorada carrera artística.

UNDER THE OPEN SKY

"Under The Open Sky" es el esperado regreso cinematográfico de Miwa Nishikawa  ("Dear Doctor", "The Long Excuse", "Sway"), basado en la novela “Mibuncho” de Ryuzo Saki. El film, estrenado en Japón el 11 de febrero de 2021, fue premiada en Chicago y se presentó en Nippon Connection y Toronto.

Mikami, un ex yakuza de mediana edad con la mayor parte de su vida en prisión, es liberado después de cumplir 13 años de condena por asesinato. Con la esperanza de encontrar a su madre perdida hace mucho tiempo, de quien se separó cuando era niño, contacta con un programa de televisión, donde conoce a un joven director de televisión, Tsunoda. 

Mientras tanto, lucha por conseguir un trabajo adecuado para encajar en la sociedad. Su naturaleza impulsiva, inflexible y sus creencias arraigadas causan fricción en su relación con Tsunoda y aquellos que quieren ayudarlo.

 

Mika Nishikawa vuelve por todo lo alto, tras una ausencia de casi 4 años. Auspiciada junto a  la productora Bunbuku —co-liderada junto a Hirokazu Kore-eda—, trasfigura el tumultuoso universo de la Yakuza, marcado por el crimen y la violencia, hacia un humanismo enriquecedor. 

La total redención es inalcanzable ante un sociedad podrida y carente de empatía hacia el rechazado, cuyo yugo perfora dentro de sus cicatrices hasta el ostracismo. Una infinita lucha por la supervivencia y la aceptación es un claro reflejo del vasto cielo que rodea a los moradores de sus baldíos terrenos.

Sobre todo, es un recital interpretativo del descomunal Koji Yakusho. A pesar de ser considerado el mejor actor vivo japonés, ha demostrado un profuso cariño hacia el personaje. Un papel que ejerce una conexión antagónica con el interpretado en "The Blood of Wolves", irradiando con su luz cada uno de sus vértices. Sin olvidar a un secundario de lujo como es el sensacional Taiga Nakano, cuyo idealismo emocional vertebra su ingenuidad hacia su excelencia. 

MY BLOOD AND BONES IN A FLOWING GALAXY

"My Blood And Bones In A Flowing Galaxy" es la esperada nueva película de Sabu ("Mr. Long","Postman Blues", "Jam"), basada en la novela de Yuyuko Takemiya y protagonizada por Taishi Nakagawa junto a Anna Ishii y Takumi Kitamura. El film se estrenó el 9 de abril de este año.

 Su argumento gira en torno a Kiyozumi Hamada , un estudiante de tercer año de instituto con un fuerte sentido de la justicia. Un día presencia cómo la estudiante de primero Hari Kuramoto  es víctima de bullying. Desde entonces, Kiyozumi se dedica a salvarla de sus abusones y, a partir de ahí, su relación se vuelve más estrecha. 

Sabu retoma orbitas reminiscentes a su anterior presentación en el festival, "Dancing Mary" (2020), que bifurcan desde la fantasía hacia el prisma de las realidades que adolecen la sociedad actual. 

 

En este ocasión, abandona su antecedente fantasmagórico por la ciencia ficción para focalizar en su retrato del bulling estudiantil y en el verdadero significado del heroísmo. El autoaislamiento producido por el rechazo social y el miedo familiar ejerce de losa extraterrestre, incapaz de ser derribada, hasta alcanzar el cenit de su simbiótica cosmogonía con la del héroe predestinado.

A pesar de la solvencia en la construcción narrativa, conseguida desde su dirección hasta el vibrante trabajo de la fotografía de Tomo Ezaki ("Tokyo Revengers"), o el de la sentida banda sonora de Jun'ichi Matsumoto ("No Call No Life"), queda lastrada por su deficiente apartado interpretativo. Un aspecto ya habitual en las últimas colaboraciones del cineasta con la agencia LDH —vinculada al famoso grupo de jpop EXILE—, marcada por la imposición de sus talentos. Tampoco ayuda el protagonismo de Taishi Nakagawa, donde la única luz actoral se atisba en las breves apariciones de Takumi Kitamura y Kaya Kiyohara.

ALONG THE SEA

"Along The Sea", es una co-producción entre Japón y Vietnam, dirigida por Akio Fujimoto, cuya premiere mundial tuvo lugar en el Festival de San Sebastián, y se ha presentado en Tokio, Camera Japan y Osaka Asian Film Festival,

La historia gira en torno a tres vietnamitas veinteañeras se convierten en residentes ilegales en Japón tras escapar de su lugar de trabajo como aprendices técnicas. An se pone en contacto con un intermediario para que les ayude a encontrar un empleo. Éste las lleva a la cabaña cubierta de hielo de un pescador donde pueden alojarse a cambio de trabajo.

 
Están contentas porque, además, ven duplicado su salario. Cuando empiezan a trabajar, Phuong cae repentinamente entre fuertes dolores. Preocupadas, An y Nhu llevan a Phuong a un hospital, pero rechazan su ingreso por no tener una tarjeta de identificación

 

Akio Fujimoto sigue la senda marcada por su sensacional debut "Passage of Life", marcada por su residencia dual entre Japón y Birmania. 

 

En esta ocasión, el foco de la inmigración incide en las perspectiva de la juventud femenina en un país circundante como es Vietnam. El germen imperialista inherente en la tradición japonesa florece en el tratamiento inhumano hacia sus congéneres a pesar de estar unidos por el mismo océano.

El ecosistema endógeno nipón es representado desde su frialdad, no solo de sus altas cotas geográficas sino en su desapego emocional para mostrar las realidades ocultadas en su idealización. La mujer es tratada casi como ganado, capaz de desprenderse con una cruel facilidad de las raíces biológicas que fluctúan con la maternidad, con el fin de no parar la avasalladora cadena productiva que es la actual economía de mercado.

KAMATA PRELUDE

"Kamata Prelude" es una película antológica compuesto por cortos dirigidos por los reputados cineastas Ryutaro Nakagawa ("Silent Rain"), Mayu Akiyama ("Rent a Friend"), Yuka Yasukawa ("21st Century Girl") y Hirobumi Watanabe ("Cry"), y protagonizada por Urara Matsuyabashi, Sairi Ito y Kumi Takiuchi. 

 

El film, estrenado el 25 de septiembre del pasado año en Japón, cerró la edición de 2020 del Osaka Asian Film Festival. 

 La historia gira en torno a una actriz en apuros llamada Machiko que vive en Kamata. Machiko es el eje central, donde se describe cómicamente lo que significa ser una 'mujer' y una 'actriz' en la sociedad al mostrar los patrones de vida que ella y las personas que la rodean llevan a cabo. 

La actriz Urara Matsuyabashi no sólo protagoniza las cuatro historias, sino que, a raíz de su labor de productora, se logra el entendimiento de su propia transfiguración hacia la intérprete ficticia Machiko. La localización  en el barrio de Kamata —situado en la ciudad de Ôta, colindante con Tokio— no es sólo es un mero escenario en el que confluye la acción, sino el punto cardinal de la representación de su poderoso mensaje feminista. 

Un discurso en torno a las doctrinas de género, el abuso tanto sexual como laboral y el papel de la mujer dentro de la sociedad japonesa. En especial, en la extrapolación de toda esa problemática hacia la esfera fílmica. marcada por la dificultad de las actrices femeninas en sobrevivir en la patriarcal industria cinematográfica del país nipón.

La brillante elección de prestigiosos directores tan dispares y de su ambivalencia en la procedencia biológica da muestra de su inteligencia. La extraordinaria compenetración desde su prisma femenino avalado por Mayu Akiyama en la lectura mundana de la amistad, la infidelidad y vida familiar o Yuka Yasukawa en la reconfiguración orgánica del abuso de poder dentro de las audiciones. 

Su referente masculino viene respaldado por el lirismo reminiscente y poético de Ryutaro Nakagawa y la vorágine en blanco y negro en la producción de un rodaje desde la perfectiva infantil por parte de Hirobumi Watanabe.

Aquí concluye la segunda y última parte de nuestra aventura por la pasada edición de Nippon Connection.  Agradecemos la oportunidad de poder cubrirlo y poder repetir el año que viene esta experiencia.